sábado, 8 de julio de 2017

loving Hungría

Es especialmente bonito que los Húngaros llamen Duna a su gran río el Danubio. La historia del país y la vida de los Húngaros transcurre alrededor de Duna. Nuestro amigo Matev, se emociono mucho al saber que llamaríamos a nuestra hija Duna, como a su gran río. Y ahora, Duna esta de viaje por este hermoso país.
Que estemos en Hungría no es casualidad. De aquí son nuestros grandes amigos Matev y Anita, que no han dudado un solo segundo en abrirnos las puertas de su casa y formar parte de su familia por unos días. Que yo esté embarazada de casi 6 meses de nuestra segunda hija también ha condicionado que decidamos veranear en un lugar en el que nos sintamos como en casa. 
No es la primera vez que visitamos Hungría. Ruben por trabajo ha visitado múltiples veces este país, y hemos pasado varios fin de año en Budapest. Pero jamás ha sido en familia y en verano, vaya, unas vacaciones veraniegas en toda regla.
Pues bien, a día de hoy casi no se ni como se llama el lugar donde estamos, nos llevan y nos traen por  donde ellos quieren, y aquí estamos dejándonos llevar... Jajaja. Pero voy a hacer un pequeño esfuerzo para explicaros algunas cosillas, ya que vinimos sin ninguna expectiva, sin saber muy bien donde iríamos, y lo cierto es que nos hemos llevado una grata sorpresa. Este país promete y mucho para unas vacaciones en familia. 
Llegamos a Budapest en avión y como no podía ser de otra manera, nos vinieron a recoger. Muchos húngaros, al igual que muchas familias españolas tienen una segunda residencia no muy lejos de Budapest en zonas más rurales o a orillas del Danubio. Nosotros estamos en Nagymaros. Un pueblito a la orilla del Danubio, justo en la curba del mismo , que pese que ellos insisten en decir que es turístico (turismo interno), nosotros lo notamos casi desértico, especialmente acostumbrados a las grandes aglomeraciones de España. Nos alojamos en una pequeña casa familiar de la familia de Anita rodeada de bosques y a pocos minutos en coche de la orilla del Danubio. 
Voy a nombrar los puntos positivos que me han sorprendido de manera bien grata de Nagymaros:
No hay aglomeraciones, te puedes relajar allá donde vayas. 
  • El Danubio, en esta zona, esta repleto de zonas de baños. No conocíamos las ventajas de bañarse en un río, pero lo cierto es que con niños, hasta me atrevo a decir que es mas ventajoso (y eso que somos unos amantes de la playa): hay zonas de arena fina como en cualquier playa, no hay olas, la entrada al agua es progresiva y no cubre, no pica los ojos, rodeado de restaurantes que no te rompen el presupuesto del mes. 
  • La comida Húngara es variada, buenísima (aunque muy calórica) y muy barata. 
  • La mayoría de los restaurantes húngaros cuenta con zonas exteriores con zonas de juegos para los más peques, lo que es liberador y ayuda mucho.
  • Nagymaros también cuenta con alguna de las montañas más altas del país, que creo recordar, no superan los 1000 metros de altura. Los parques infantiles cuentan con juguetes comunitarios (cubos, palas, etc), y los que son de arena, son de arena fina que permite que los niños estén descalzos todo el tiempo.
Y Duan esta encantada. Es alucinante ver la capacidad de adaptación de los niños. Se pasa el día pegada a Viola, la hija de nuestros amigos. Y aunque no tienen ni una palabra en común, pueden pasar horas jugando, viendo los dibujos en Húngaro y hasta tengo la sensación que Duna empieza a entender ciertas ordenes en ingles.



viernes, 5 de agosto de 2016

REFLEXION DE UN VIAJE Y ALGUNAS CUESTIONES PRACTICAS



Ahora que ya llegó el final y podemos mirar con perspectiva todo el viaje, he de reconocer las primeras  tensiones de los primeros días. Tocó habituarse, el calor, las comidas, la higiene... Si, me preocupaba (al menos mas que ahora) que tocaba Duna o quien la tocaba, la suciedad... Etc. Ahora,que volvemos a estar en Bangkok me olvide casi de lavarle las manos y me resultó imposible controlar todo lo que llegan a dar a Duna de comer. Allá donde vamos, la gente le ofrece algo. Cada mañana el señor que vende lotería de la calle del supermercado le regala un globo que la hace muy feliz, las señoras le ofrecen fruta, galletitas, en los restaurantes se la llevan a la cocina y Duna sale con fruta y lo que se tercie. Definitivamente, en esta parte del mundo aman a los niños. Me encanta ver sociedades en las que los niños forman parte natural de la comunidad siendo aceptados tal cual, y siendo bienvenidos tal y como se merecen. 

Todos los miedos que existían  y otros muchos que te intenta inculcar la sociedad se han difuminado. Nada más lejos que todo eso. Duna enfermo la primera semana nada mas llegar, a partir de ahí, nada-de-nada. Ha comido todo lo que se la puesto por delante, a crecido este mes y medio, no solo lo que le toca por su edad, sino que ha crecido rodeada de personas extrañas que le han mostrado afecto, atención y mucho respeto. Ha jugado con niños de muchos países diferentes y todos se han comunicado como si hablaran el mismo idioma, ha viajado en avion, moto, barco y tuk tuk. Ha visto elefantes, pájaros, y múltiples bichos que ahora identifica, se ha rebozado en la arena durante 25 días completamente en pelotas, ha conocido el mar y los peces, ha aprendido a cantar y tocar la guitarra fruto de ver como lo hacían otros ( en Kapas se daba mucho lo de tocar la guitarra a la luz d ella hoguera), bueno, mas bien a imitarlo... Ha soportado el calor casi con más dignidad que nosotros, y se ha adaptado a los cambios de una manera sorprendente.

Des de luego ha sido otra manera de viajar, mas relajada, estando en los sitios, haciendo rutinas, buscando lugares donde los tres nos pudiéramos relajar y ser felices. Y lo hemos conseguido. 

En mi opinión las ciudades asiáticas son algo incomodas para ir con bebes. Tanto Bangkok como Kuala Lumpur ( y diría que esta mas aun) están repletas de barreras arquitectónicas. El carrito ha sido una gran ayuda, pero acarrearlo por ambas ciudades repletas de bordillos y escaleras era una tarea bastante agotadora. El día que optamos por coger transporte público en Kuala Lumpur juramos que nunca mas lo háriamos. Tuvimos que salvar tantos bordillos y subir y bajar tantas escaleras con el carrito a peso bajo las altas temperaturas tropicales, que cuando llegamos al lugar estábamos tan cansados y sudados que no podíamos ni pestañear.
Supongo que los locales ya le tendrán el punto pillado, pero tu que eres un turista, NO. 

Hemos aprendido que:
  • En los centros comerciales suelen haber parques infantiles. Si, tienen zonas de juego con columpios y tal. En Bangkok, en el Siam Center y en el Central World los tienen. en Kuala Lumpur, experimentamos poder estar en el parque de atracciones mas grande de Asia dentro de un centro comercial (Toma Ya! Si, eso existe y tiene una montaña Rusa en toda regla). Esta en el Plaza Square. Supongo que cuando vives en un país con temperaturas extremas, tener el ocio bajo techo facilita las cosas. 
  • En Bangkok los parques a partir de las 17 horas son espacios muy transitados por locales y no tan locales donde llevar a los peques, hacer deporte, taichi o lo que se tercie. 
  • El zoo Dusit de Bangkok (150 baht x adulto), aunque nos genera cierta contradicción, este está fundado sobre el antiguo parque botánico. Así que sus jardines y comodidades te ayudan a pasar un día con un peque en la ciudad. 
  • El Bird Park, Perdana Botanical Garden, etc  De Kuala Lumpur es enorme y con muchas alternativas. Lo visitamos en dos días. Uno para ver el parque de los pájaros y otro para visitar el parque. 
  • Respecto a las comidas. Casi todos los lugares ofrecen sopas, arroz frito, tortilla, pan,pasta, pescado a la bbq. Casi todo el mundo sabe que recomendarte cuando le dices que es para tu bebé. Si ves que es mujer y entrada en edad, aun te recomendara mejor. Eso si, Duna ha comido arroz y pollo para el resto de sus días. Cuando le ofrecíamos noodles, estos salían volando a propulsión del plato. Y aunque, yo como "buena madre", no le ofrecía sal, ni azúcar, ni bolleria, ni helados en casa.... En el viaje Duna aprendió a amar los helados, el chocolate y si me apuras, hasta el picante. 
  • En todo el viaje (Bangkok, koh Samui, Kapas y Kuala Lumpur) es habitual que encontrar tronas. Aunque como en España, no siempre. 
  • Los centros comerciales tienen salas de lactancia y cambiadores. 
  • Encontrarás pañales en todas partes y múltiples marcas. Los Mamipoko nos funcionaron súper bien. Sus toallitas también. 
  • Duna ha lactado sin problemas donde ha querido. He intentado ser discreta, tapar mi pecho con un pañuelo si iba con vestido, pero ya suelo hacerlo así. Nadie me ha dicho nunca nada ni he visto ninguna cara de ofensa. De hecho algunas mujeres sonreían al vernos.
  •  
    Como puedes leer, no nos arrepentimos para nada de haber afrontado esta experiencia, y estamos deseosos de volverla a repetir. 
Perdana Botanical Garden

compartiendo con otros peques

tardes de parque en Bangkok

parque infantil en centro comercial

viajando en tuk-tuk

EL PARAISO EXISTE, Y SE LLAMA KAPAS







Dicen de Kapas que debería quedar en secreto, evitar que todo el mundo vaya a Kapas y corra el riesgo de perder su encanto, pasando a ser una isla sobreexplotadada, como parece pasar en las Perhentian. Pero el secreto ya se desveló hace algún tiempo y no debemos perder de vista que al final la responsabilidad no pasa solo por las personas que puedan desear ir allí sino de quienes apuestan por un tipo de negocio u otro en la isla.


De Kapas hay que destacar su fácil acceso, a tan solo 15 minutos de Marang (mainland), cojes una lancha y te plantas en la isla (MHG, 30 ringis ida y vuelta). Para llegar volamos de Kuala Lumpur a Kuala Terenganu y de ahí, nos fuimos en taxi a Marang donde cogimos el jetty hasta la isla de Kapas. El vuelo con AirAsia salió tirado (38€ los tres, one way).

Ir a Kapas fue la mejor decisión que pudimos tomar, después de varias semanas viajando con la bebe, sin lugar a dudas. Todos los blogs hablan maravillas de este lugar, lo comparan con Perhentian y otras, y parece ser que es la mas tranquila y acogedora. Nosotros fuimos a Perhentian hace unos 9 años, y por lo que explica la gente se ha transformado en una playa poco relajante repleta de restaurantes.

Por poner un poco de controversia al tema, Kapas "decepciona" un poco nada mas llegar. Es cierto que es preciosa, pero por suerte el mundo tiene muchas otras islas con este encanto y playas similares. Tantas maravillas habían hablado de ella que me esperaba... No se.... Algo realmente sorprendente. 

Aún así, la verdad es que Kapas nos acabó cultivando, aunque creo que no solo fue Kapas la responsable de estos 15 días de ensueño, sino que el KBC tuvo mucho que ver en ello. 

El KBC es el lugar donde nos hospedamos. Son Bungalows plantados en mitad de la arena, y con espacios comunes que facilitan la relación entre sus guests, tipo backpackers con mucho encanto.

Con Duna no nos imaginábamos un lugar mejor donde estar. Aunque había momentos que añorábamos nuestros viajes cañeros en los que nos relacionábamos con locales y cambiamos de lugar cada dos días, es cierto que con la peque solo de pensar en viajar, pasar calor, etc nos agotaba.

En el KBC, duna nada más bajar los escalones del bungalow tenía toda la arena de la playa para jugar, estar todo el día en pelotas, correr detrás de la gallinas, sus pollitos y gatos,  poder campar a sus anchas ya que no había casi nada que romper y a nadie a quien molestar. Y es que estar pendiente de tu hija todo el tiempo, para que no rompa lo que tiene a su alrededor, no moleste con sus gritos o sus ganas de investigar todo lo que hay a su alrededor, de que no la atropelle un conche, etc es tremendamente agotador (porque nunca se estará quieta, necesitara correr, investigar, gritar, llorar etc). Es imposible definir con palabras el ambiente de este lugar. Per sin lugar a dudas, Kapas ha sido un lugar mágico donde no solo nos hemos podido relajar, sino que Duna ha podido estar y crecer de una manera muy.... Como diría yo? Salvaje? Natural? Integrada entre todos los adultos del lugar?? No se.... Pero quiero dar las gracias al KBC y su personal por hacernos sentir como en casa, a Marius y a sus papás por los largos ratos de juegos y la cantidad de mamporros que se dieron los dos, a Julián y Eva por permitirnos bañarnos juntos mientras vigilaban a Duna, a las chicas argentinas por disfrutar tanto con Duna y dejarla tocar toda su tecnología, collares, etc, a Miquel por esos ratitos de música y risas, a juliette y Medhi por enseñar a Duna a decir adiós en francés y dejarle comer su helado, a Salva, a Toni, a Sonia y Rafa por los buenos ratos de charla....y a todos a cada uno de los currantes del KBC, empezando por Zequi y Ana, excelentes cocineros, Dani, Riza, Cha, Broco, Kayan...... En fin a todos/as.

 Duna fue feliz des del mismo momento en que llego. 

Como cuestiones practicas si vas con un bebe y que nos fueron bien o mal:
  • El KBC tiene juguetes de playa que ayuda a entretenimiento de los peques.
  • No venden fruta en la isla. Nosotros pedíamos ensalada para desayunar y nos la guardaba en tupper para dársela a Duna en la merienda. 
  • Si te piensas que por se una isla te hincharas a comer pescado, pues no, es zona protegida y debes de olvidarte de sabrosas bbq de pescadito a la brasa. 
  • Llévate cámara de vigilancia y si estas en uno de los primeros bungalows ( del uno al 3) te puedes relajar en la playa mientras tu baby duerme la siesta, si se levanta vas y punto.
  • Al lado del jetty, en la playa que sigue a donde está KBC, hay un restaurante local donde una mujer te prepara sopa rica para la bebe sin problema y deliciosa.
  • En el restaurante KBC te pueden hacer una pasta para la pequeña espectacular. 

 





viernes, 15 de julio de 2016

Koh Samui (Family & Baby friendly Island)


Hemos estado 10 dias en Koh Samui, 10 dias que no se han hecho largos si no todo lo contrario dado que en este viaje como sabeis viajamos con una bebe de 16, bueno 17 meses ya!!!.

En esta entrada vamos a daros cuatro pistas (tips) para haceros con la isla si viajais con bebes.

Lo primero que debeis saber es que las playas de Koh Samui no son esas playas espectaculares que salen en los anuncios de Tailandia. Nosotros llevamos ya unas cuantas y la verdad es que con excepcion de Chaweng, el resto de las que hemos visto en la isla no estan mal. Aun asi, las palmeras, masajes, cocos, aromas, tumbonas a pie de playa y el rollo thai en general, hacen de Koh Samui un destino a valorar.

Para orientaros rapidamente, el destino por excelencia de los paquetes cerrados tipo resorts es Chaweng, que como antes deciamos, es la playa mas bonita tipo arena blanca y agua azul. Al ser destino de resorts, digamos que la mayoria de la gente esta metida en su resort y en las hamacas que le tocan enfrente. Es una zona para nuestro gusto muy ruidosa y con demasiada oferta, pero hay quien busca eso en tailandia.

Al sur de Chaweng esta Lamai, que es donde hemos pasado 4 noches. No esta mal, es mas tranquila que Chaweng pero la playa no es muy espectacular aunque los dos ultimos dias debemos decir que el sol que salio le dio un toque al agua verde esmeralda alucinante. Aqui hay servicios tambien, y un mercado de comida en la calle todas las noche que merece la pena, el problema es que esta al lado de una zona de bares de esos en los que mujeres ligeras se deslizan por una barra, lo mas fuerte es que ves a familias con sus hijos viendo el espectaculo, en fin.


Al noroeste estan las playas que para nosotros merecen mas la pena si el tipo de viaje que buscais es tranquilidad y todos los servicios a un golpe de moto. Las playas son Rangkrak, Bo Put y Mae Nam, en esta ultima no hemos quedado nosotros 6 noches en un lugar maravilloso, Tree House, os lo recomendamos por su comida, su rollo y su gente. Tiene un punto hippie que te hace escapar de la masificacion que a veces respiras en Koh Samui.



Para moverse por la isla ya sabeis que nosotros somos de moto. Esta vez negociando el precio hemos alquilado una Hond Click 125 automatica por 150 baths al dia, este modelo es ideal para llevar el carrito MaClaren encima, se ajusta a la parte delantera como un guante y te permite desplazarte con bebe, mama y papa. Ojo, aqui esta permito viajar 3 en una moto, pero nosotros hemos tomado precauciones basica, le hemos comprado un casco a Duna en el tesco (149 bath) monisimo, y ademas no hemos pasado de 40 km hora, recordad que en Tailandia se conduce por la izquierda pero en Koh Samui ni lo notas porque practicamente siempre conduces en recta.




Para acabar, despues de mirar mas de 20 opciones de alojamiento una par de dias con la moto en las diferentes playas, la conclusiones es que por 500-800 baths puedes tener bungalow en la playa, no en primera linea, en todas las playas menos en Chaweng.


jueves, 7 de julio de 2016

PASEANDO POR BANGKOK


Definitivamente viajar con un bebe es diferente, muy diferente.

Para empezar, tenemos reservada la primera semana de hotel...si, lo que leéis... Y además en hoteles de 3 estrellas....uaaaaala!!! Si que hemos cambiado!!! Jajajaja.

Seguro que puedes no reservar y esas cosas, pero para nosotros es mejor tener controlado algo. Los primeros días requieren de mucha adaptación, y una cosa menos en la que pensar facilita la vida.  Tienes que adaptarte al clima, al horario, las comida, detectar que y donde dar de comer a Duna (la peque) y encontrar espacios de juego para ella donde poder pasar el rato cuando entra en modo turbina (una ciudad como Bangkok, de entrada no lo facilita, aunque nos hemos sosprendido positivamente). 




Nos hospedamos en el Royal Hotel, a 2 minutos de todo el meollo de Khao Sand Road, pero en una zona más tranquila. El hotel es un poco cutre pero muy limpio,  es como una pequeña ciudad, hay congresos, filman pelis, siempre esta abarrotado de gente, hay tiendecitas, restaurantes, una pequeña farmacia china, etc. 

La primera tarde la pasamos refugiados de la lluvia monzonica en un bar de Khao San.  Duna fue la atracción de feria de todo el staff del local. Bailo todas la canciones de bob marley mientras los empleados le aplaudían y le decían cosas que no entendíamos. Pero parecía que también se lo pasaban bien. Ellos mismos se encargaron de hacerle una sopita de arroz y pollo que Duna deboro con gusto. Se quedo dormida en pocos minutos, y nosotros pudimos cenar tranquilos y poder pasear por las calles de alrededor. 



El siguiente día, pudimos visitar el Gran Buda reclinado, e ir a Siam Centre. El ultimo es un centro comercial, se avecinaban lluvias y era una alternativa a no acabar empapados. Los traslados los hicimos en taxi... Si en taxi... Ni en tuktuk ni en transporte público... En taxi... Jejeje (los precios oscilaron entre 4 y 6 euros maximo, asi que tampoco es un drama).



Para cenar Duna probo el arroz frito y un pescado a la bbq. Volvió a caer fulminada y cenamos tranquilamente cerca de Rambutri, de hecho en el barrio donde vivia nuestro amigo Fran y que el no ensenyo con tanta pasion. Si quereis cenar la zona esta justo despues de pasar el rio que esta al lado de Rambutree St., una vez lo pasais, dejando atras Rambutree, girais a la izquierda y vereis que hay muchoos puestos tipicos de restaurantes con las cocinas en la calle, nos encantan.
Como era de esperar, con tanto cambio de temperatura, Duna se ha resfriado y amaneció con fiebre.  No se qué manía tienen en este país de poner los aires  para sentirse como en el polo norte. Así que hoy Duna decidio dormir una siesta matutina después del desayuno en el hotel. Y nosotros decimos que era buena idea acompañarla . Salimos para la hora de comer. Y ya con el estomago lleno fuimos a un pequeño parque muy pero que muy agradable en Praathit Rd junto al Río Chao Praya. Nos lo recomendó nuestro amigo Fran. Alli hemos conocido a una pareja de ingleses que llevan viajando con su hijo de dos años durante un año. Al atardecer los parques se activan, las familias van con sus hijos, la parejas pasean, y hasta se hacen clases de aerobic, Ruben y Duna lo han gozado. Así que entre todos los intentos de robo de pelota a todos los niños del parque, la gente mayor que ha estrujado las mejillas de Duna, y la clase de aerobic, hemos interactuado con medio parque.



Los bebes aquí son bien recibidos en general. Los Thai los adoran, sacan sus móviles y fotografían a tu hija, así, sin más. La cogen, le hablan, le bromean...le insisten en que diga "Sabadee haaaa"... Desde luego no pasamos desapercibidos. Y menos con una hija como la nuestra, que no se calla ni debajo del agua, y que ríe las gracias a todo el mundo. 

Mañana nos vamos a Koh Samui. Qué ganas de escapar del calor y de la ciudad.

VOLANDO CON DUNA

Cuando viajas en avión por primera vez con tu hija te asaltan muchas dudas, pero al final todo resulta mucho más fácil de lo que imaginamos.

La cola de los embarques no la chupamos igual que ir sin un bebe, así que nos toco recorrer parte del aeropuerto con ella mientras iba salundando y haciendo ojitos a las policía nacional.

La única cola que nos ahorramos fue la de seguridad y la de embarque. La cola de control de aduanas también no la comimos y fue bastante larga y caótica. 

Teníamos reservados los asientos delanteros en los dos vuelos, lo que fue de agradecer, ya que una niña del tiempo de la nuestra es imposible tenerla sentada mas de medio minuto (bueno, si que se puede, los niños asiáticos lo están... No se... O los drogan...o algo estamos haciendo mal nosotros.. Jajaja). 

Una vez en el avión colmaron a Duna de jueguecitos y muñequitos. Tomas, un oso vestido de comandante fue exitazo total, entre cepillos de dientes, auriculares, zapatillas 10 números mas grandes, labiales...y otras cosas que solo sirvieron para estar tirados por el suelo todo el tiempo mientras lo recogíamos constantemente. 

Duna durmió en los dos vuelos. Nada mas despegar se durmió, en los dos. Así que triunfamos como los Chichos y el resto de pasajeros también, ya que Duna saludo a sus vecinos como 156  veces antes del despegue. 

En la escala íntentamos que corriera y se desfogara antes de coger el siguiente avión. Los niños pueden lleva una bolsa con comida, frutas, picoteo, agua etc.

Duna comió la comida del avión, casi no usamos lo que llevábamos.  El susto nos lo llevamos a la llegada a bangkok, cuando supimos que una hora después de nuestro despegue había habido un ataque terrorista con 50 muertos y 147 heridos en la entrada de la terminal donde habíamos estado. Fue horrible la noticia.

La companyia que hemos escogido ha sido Turkish Airways, un vuelo de Barcelona a Istambul y despues a Bangkok. El vuelo mas largo, el de Istambul a Bangkok, se hace por la noche asi hemos conseguido que Duna durmiera practicamente todo el vuelo.

sábado, 25 de junio de 2016

CON DUNA EN LA MOCHILA


Hace dos años que no viajamos, y aunque hemos emprendido el viaje mas emocionante de nuestras vidas, ser padres, seguimos echando de menos lanzarnos a la aventura a cualquier parte del mundo. Y tenían razón todos aquellos que nos decían que cuando tienes un hijo todo cambia... Cierto... Totalmente cierto.

Aunque vamos a ver como se construye nuestro viaje con una niña de 16 meses.
El destino? Tailàndia. Porque Tailàndia? Pues porque la conocemos, nos gusta, es un destino fácil, repleto de comodidades, no es necesario vacunarse, tiene choque cultural, la comida es buenísima, tiene playas de ensueño...

Vamos a intentar explicar nuestro viaje que será de unas 6 semanas. Lo cierto, es que hay muy pocos blogs que hablen de viaje con niños y menos aún que viajen con presupuesto bajo, por tanto, espero que nuestro relato sea útil para muchos otros padres que se aventuren a viajar con sus pequeños.

He de reconocer que hay una parte de mi que tiene cierto miedo. He de decir que he tenido que escuchar muchos comentarios en plan "como os atrevéis a ir tan lejos con una niña tan pequeña, exponiéndola a enfermedades raras". Y si señores, tengo muchas inseguridades: y si se pone enferma allí que? ( y me refiero a un virus chungo y grave... Es cierto, como en casa en ningún sitio...y como nuestro sistema sanitario, ningún otro), como vivirá la no rutina? Y comer cada día fuera? Se adelgazara mucho? Lo pasara mal con el calor? Y en los viajes? ... Duna es el ser que mas amamos, por tanto, cualquier cosa que la dañara seria de gran dolor.

Pero todos sabemos que en muchas ocasiones afrontar nuevas situaciones aportan miedo, y que se trata de superar este miedo para poder vivir de grandes experiencias en la vida y hacernos crecer. En el fondo, sabemos que Tailandia es un país limpio, seguro, y que si nosotros estamos tranquilos y felices Duna estará feliz como una perdiz con sus papis sea en Tailandia o en el jardín de casa.

Ahora vamos al lío con algunas cuestiones practicas. De hecho no se si serán al final practicas o no, pero os cuento un poco tema avión, botiquín, etc.

En cuanto al equipaje. Además del mínimo de ropa posible, que además sabiendo que con Duna no vamos a hacer grandes rutas, eliminaremos algunos básicos como calzado y ropa de montaña.

Llevamos un carrito McLaren. Lo compramos de segunda mano, y parece útil para plegarlo y colgártelo. No se cuanto lo utilizaremos, porque en la playa poco uso le vamos a dar, y el Bangkok poco adaptado lo recuerdo. Pero creo que debe de viajar con nosotros si o si... Me lo dice el corazón.... Jajajaj. (Ahora que revisamos esta entrada, confirmamos que es muy util y siempre se puede dejar unos dias en algun hotel donde hayas estado y recogerlo a la vuelta de la playa, que es lo que vamos a hacer nosotros).

Aparte llevamos una mochila de porteo, la boba air. No pesa y ocupa muy poco. Tampoco se la utilidad que le daremos, ya que con el calor que hace allí igual se nos derrite la niña ahí dentro (de nuevo, revisando la entrada, la mochila es imprescindible, sobretodo si os pasa como a nosotros con Duna que cuand esta cansada la colocas en la boba y se duerme de inmediato, para evitar el tema de calor se puede hacer en un centro comercial y despues al carro).

Sobre el botiquín, deciros que el sentido común nos dice que no llevemos casi nada, ya que no vamos a una zona donde no tengamos acceso a la medicación. La pediatra de Duna nos ha hecho un pequeño botiquín con:

  • Paracetamol
  • Ibuprofeno: que al final no llevo, ya que único formato ene este país es de jarabe enorme, y llevarlo es un Coñazo. Con la pediatra valoramos que con el paraceramol ya teníamos suficiente, y que si es necesario lo compramos allí.
  • Antiestaminico oral: por si come algo, tiene alguna reacción alérgica, si tiene purito y esta muy incomoda, etc
  • Talquistina: pára el purito del calor
  • Suero: Para la hidratación
  • Colirio para los ojos: como Duna ya paso una conjuntivitis, llevamos este medicamento por si aparece una conjuntivitis.
  • Pomada con corticoide porque sufre de piel atópica
  • Crema para las picaduras de mosquitos
  • Crema pañal
  • Repelente de mosquitos
  • Protector solar
  • Tiritas
  • Betadine
  • Gasas 
Y creo que ya esta. Bueno, vamos bien cargaditos... Solo con esto llenamos la mochila... Pero lo que tengo bien claro, es que a la que tenga algo de fiebre la llevare al pediatra y punto.

Cierro aquí esta entrada, es la una de la mañana y Duna me reclama. Ya os seguiremos contando.